Brainguard es un wearable que predice las crisis de migraña. A través de este wearable y de modelos predictivos se puede anticipar el inicio del dolor con hasta 47 minutos de antelación para que los pacientes puedan gestionar la toma de medicación, reduciendo así su intensidad o evitando la crisis.
Entre los principales beneficios de este método está que al utilizar sensores de parche y dispositivos inalámbricos, es posible una monitorización ambulatoria, sin técnicas invasivas para el paciente y con una gran usabilidad y comodidad.
Los expertos han probado en un entorno de simulación la efectividad de este sistema de predicción y alerta temprana en tiempo real, con una fiabilidad de más del 75% en tiempos promedio de 25 minutos, tiempo suficiente para evitar o reducir el dolor de estos episodios.
La migraña es una enfermedad neurológica altamente prevalente e incapacitante. Afecta a entre un 12 y un 15% de la población y su forma más severa y crónica afecta aproximadamente al 2% de la población mundial. Los ataques pueden durar de 2 a 72 horas, empeorando su calidad de vida y dificultando la relación con su entorno social y laboral. En Europa esta enfermedad supone grandes gastos tanto a entidades públicas como a privadas. No existe una cura efectiva para la migraña, por lo tanto, las personas intentan reducir el dolor de diferentes maneras, sin embargo, los médicos y los pacientes estuvieron de acuerdo en que si se toman medicamentos con anticipación, se puede reducir la gravedad del dolor, mejorando así la vida condición de los enfermos
La toma anticipada del medicamento podría evitar el dolor, mejorando así la calidad de vida de los pacientes además de ahorrar costes económicos a la sociedad, pero para ello es indispensable una predicción objetiva del momento en el que aparecen las crisis.
